La superluna llena de fresa

El 24 de junio a las 20:40h., nos visita la luna llena, la “luna de fresa”, es la mejor señal de la llegada del verano. Es la luna más pequeña del año. Es la última luna de primavera y fue bautizada así porque las tribus “Algonquin” la conocían como una señal para recolectar fruta madura, coincide con la maduración de los frutos de los árboles y con la belleza máxima de las flores. Principalmente su nombre hace referencia a una fecha importante de cosecha de fresas en el hemisferio norte.

También llamada “Luna de los caballos” por los Celtas; “Luna del grano verde” por los indígenas norteamericanos y en el hemisferio sur sólo es la pequeña luna del invierno

En Europa es conocida como "luna de aguamiel", esto porque en junio es la temporada donde la miel está madura y es cosechada.

Al parecer, la tradición se remonta al menos al siglo XVI y algunos piensan que la costumbre de llamar al viaje de bodas "luna de miel" tiene su origen en la costumbre de casarse justo en el mes de junio, asociando la “miel” a la dulzura del nuevo matrimonio.

Nuestra intuición va en aumento a medida que llega esta luna. Es el momento ideal para recolectar y cosechar las cosas que sembramos a principios de la primavera. La “luna de fresa” es un momento de transformación a medida que continuamos madurando. Es el momento de elegir nuestras intenciones. El significado espiritual de la luna llena de junio de 2021 se relaciona con la buena fortuna, el optimismo y la generosidad.

Es una luna amistosa y nos sentiremos diferentes, llenos de energía. Es un periodo único para organizar nuestra vida, para modificar metas, para dejar atrás lo que no nos sirve y para ir con seguridad y destreza tras los objetivos que nos planteemos.

Es importante revisar los objetivos que nos planteamos al principio del año, y desechar lo que no ha dado frutos, proyectando unos nuevos. Debemos soltar nuestras frustraciones, para no aferrarnos a ellas. Seamos como el agua, acariciemos su frescura y permitámonos fluir a lo largo de la jornada

Ahora más que nunca es el momento de permanecer en el momento presente. Manifestar en nuestro corazón y nuestra alma, el espíritu de Amor y Luz y enviarlo al mundo.

Respiremos a través de las situaciones que ponen a prueba nuestra paciencia y sintamos, los pasos que debemos dar para avanzar en la vida con coherencia y amor.

Es momento de la gran limpieza: Limpiemos nuestra vida, nuestro espíritu.

Limpiemos armarios y cajones, el desorden, papeles viejos, ropa vieja, todo lo que este obsoleto y nos haga vivir a través del caos emocional.

Podemos tomarnos tiempo y hacer esta limpieza durante las próximas semanas. Nos beneficiará enormemente en nuestro camino espiritual. El desorden tiende a atraer energía negativa. Es por eso que limpiar nuestro hogar, nuestras cosas, es importante, ya que libera energía y deja entrar la luz.

Laura Berbis

Coach@PNL