Pre-ocuparte / Ocuparte
- Laura Berbis
- 25 may 2021
- 2 Min. de lectura

A lo largo de nuestra vida cotidiana, en el día a día, surgen muchas situaciones imprevistas, de diferente índole, que a veces nos rompen nuestra armonía interior y nos causan desasosiego. Es entonces, cuando se nos presenta el dilema: ¿debo preocuparme u ocuparme?
Para ello debemos tener clara la diferencia entre una cosa u otra. La mayoría de personas consideran que la vida está llena de preocupaciones, y que por ello es normal preocuparse sin considerar otras opciones.
Cuando estamos preocupados, entramos en un estado de inquietud, que nos genera negatividad, ansiedad y miedo. Lo cual nos bloquea para encontrar soluciones efectivas y ocuparnos de aquello a lo cual tenemos que darle solución.
Nuestra cabeza, da vueltas una y otra vez a lo mismo, entrando en un bucle infinito, que da como resultado un agotamiento mental y físico, que nos impide tener ninguna iniciativa para encontrar una solución.
Cuando nos ocupamos, analizamos desde la tranquilidad posibles soluciones, hasta que al final escogemos una y pasamos a la acción. En este momento la energía que invertimos es positiva y nos ayuda a revertir la situación que nos ha generado ese malestar.
Hay personas que viven eternamente “preocupadas”, y al final llegan a un desgaste emocional, que no les permite discernir la realidad, ni ver la salida y eso les ocasiona más problemas añadidos. La preocupación nos absorbe tiempo y energía que le restamos a la construcción real de proyectos o soluciones.
Cuando escogemos “ocuparnos” nuestra actitud cambia y nos sentimos invadidos de energía positiva que hace que nos volvamos proactivos, porque tomamos acción, nos sentimos vivos, dejamos que las cosas sucedan y creamos lo que queremos ver en nuestra vida.
Por tanto, vamos a dejar de “preocuparnos”, porque no merece la pena, y como dicen: si el problema tiene solución, ¿por qué te preocupas? Y si no la tiene, preocuparse no sirve de nada.
En definitiva, merece la pena vivir una vida plena, despreocupándote de las cosas que realmente no son importantes y ocupándote de las que sí lo son, para sentirte más alegre y feliz.
Vamos a concienciarnos a partir de hoy, de que la preocupación no nos lleva a ninguna parte, y que es el momento de ocuparnos en vivir el día a día, lo que tenga que venir, ya vendrá…, que pase lo que pase, todo pasa…, y que venga, lo que venga, soy un vencedor.
Recuerda que debemos hacernos cargo de nuestra vida, para ocuparnos y no preocuparnos, al fin y al cabo, todo tiene el valor y la importancia que tú le das.
Laura Berbis
Coach&Pnl
تعليقات